En estos momentos en que el Gobierno Nacional define el presupuesto para el 2015, es preciso evaluar los ingresos petroleros de los que dependen gran parte de los gastos de la Nación, como lo indicó Mauricio Cárdenas Santamaría, ministro de Hacienda, los cuales representan cerca del 2 % del PIB.
Al respecto, Alejandro Martínez Villegas, presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP), indicó que “mientras en el último año la economía colombiana en su conjunto creció a una tasa promedio del 4 %, el sector lo hizo al 7 %. Solo en impuestos, derechos económicos y dividendos, la industria petrolera generó ingresos al Estado por $25 billones en 2013; es decir, 12 % más que en 2012. Las regalías para este año se estiman en más de $10 billones, lo que significa un aumento de 21 % frente a lo pagado en 2013. Todo esto habla de un sector fundamental para la economía del país. Sin embargo, el gran reto será sostener la tendencia de crecimiento, siempre y cuando los obstáculos que enfrenta la industria se puedan superar”.
Por eso, el ministro de Hacienda ha sido enfático en decir que “el país debe ser consiente de que cada peso que obtengamos por el petróleo es un peso que nos vamos a ahorrar de impuestos, a todos los colombianos nos conviene que la renta petrolera aumente y eso significa que el sector petrolero tenga un buen desempeño, que crezca y que tenga buenas utilidades, porque más renta petrolera son menos impuestos y vamos a tener todos los colombianos un alivio en la carga tributaria”.
Cálculo de la renta petrolera
Son tres elementos por los que se capturan dineros del petróleo con, como lo explicó el ministro Cárdenas: “el Impuesto de Renta de las empresas del sector minero-energético, el Cree de las empresas del sector minero-energético y los dividendos de Ecopetrol que recibe la Nación como accionista” y esta renta es determinante para los escenarios fiscales en Colombia.
Este asunto ha cambiado con el tiempo, porque anteriormente hubo escenarios de precios más altos, en comparación a los que hay hoy en día; segundo, el ritmo de crecimiento de la producción de petróleo es difícil de sostener hacia delante, y tercero, es que los costos de producción de petróleo están en aumento ya que extraer petróleo en Colombia se vuelve crecientemente difícil porque “para sacar petróleo hay que sacar agua, hace cinco años por cada barril de petróleo probablemente había que manejar entre cinco y seis barriles de agua, hay que tratarla y hacer todo el procedimiento para poderla reutilizar, por ejemplo en cultivos, hoy, en cambio, podemos estar hablando de 20 barriles de agua por cada barril de petróleo, porque hay que inyectar más agua para sacar el petróleo porque recuperar el petróleo es más difícil, es una producción de crudo más pesado, que se hace más difícil de extraer, entonces esto aumenta costos y reduce utilidad”, indicó Mauricio Cárdenas Santamaría; y de esa rentabilidad es la base de los ingresos nacionales del petróleo.
Sin petróleo se necesitan más ingresos
El Banco de la República, en un estudio sobre las rentas petroleras, manifestó que “es por esa razón que en una economía con petróleo, el manejo de las rentas provenientes de la explotación de ese recurso es una de las más importantes funciones del Gobierno. El manejo de las rentas define también la forma como los ingresos por la explotación del recurso van a irrigarse a la economía”.
Es por eso que, coinciden expertos, analistas, ministros y productores petroleros, para sostener el presupuesto que la Nación necesita para ejecutar los proyectos del 2015 hay que cuidar la producción de petróleo.
“Todo esto habla de un sector fundamental para la economía del país. Sin embargo, el gran reto será sostener la tendencia de crecimiento, siempre y cuando los obstáculos que enfrenta la industria se puedan superar. Dicha tarea, además del esfuerzo extraordinario que ya viene haciendo el sector, necesitará un Estado que trabaje mancomunadamente con las empresas petroleras en el desarrollo de políticas públicas claras, eficientes y en la búsqueda de soluciones de fondo a problemáticas que están empezando a afectar la viabilidad y sostenibilidad de las operaciones de las compañías del sector”, explicó el presidente de ACP.
La tarea del Estado
El Estado, entonces, tendrá que ponerle atención, como lo sugiere ACP, a “las incertidumbres y demoras en las consultas previas y en el licenciamiento ambiental, los bloqueos a las operaciones, los ataques terroristas y recientemente a las consultas populares, que son las amenazas que deberá vencer el Estado para lograr los supuestos petroleros previstos en su Marco Fiscal de Mediano Plazo. De no atenderlas, las reservas de petróleo del país y la producción de hidrocarburos se verán afectadas en el corto plazo, pues las cifras del sector ya comienzan a generar alerta”.
El ministro Cárdenas reconoce que la meta de producción de petróleo se ha tenido que bajar varias veces “porque ha habido dificultades, pero el Gobierno Nacional hace esfuerzos por garantizar que la producción se recupere en estos últimos meses del año”.
“No hay meta fiscal posible sin un sector viable. Solo en la medida en que desde el Estado se dé repuesta a los problemas de orden público, licencias ambientales, consultas previas y consultas populares, entre otros, será posible el hallazgo de nuevos descubrimientos y lograr una producción de petróleo y gas natural en los niveles que demandan los retos de crecimiento económico que se ha impuesto el país”, aconsejó Alejandro Martínez Villegas.