La propuesta del expresidente para financiar las vías antioqueñas es un reflejo de la incertidumbre sobre la infraestructura desde las regiones.
Ayer, por medio de un video publicado en la red social X, el ex presidente de la República, Álvaro Uribe, lanzó una audaz propuesta para soportar la financiación de los grandes proyectos viales de Antioquia. El ex mandatario invitó a “un millón de antioqueños” a aportar “de a millón de pesos, unos más y otros menos, unos a título de donación y otros a título de préstamo” para “concluir las vías que cruzan por Antioquia, de interés para todo el país”.
Uribe calificó esta ‘vaca’ para la infraestructura de su departamento de origen como un “desafío cívico” e instó a que la iniciativa fuera liderada por la Gobernación de Antioquia, el alcalde de Medellín y demás alcaldes, la empresa privada, los grupos cívicos y los trabajadores. “Hemos podido con cargas mayores”, concluye el ex presidente, cuya propuesta arriba en momentos de alta tensión entre el Gobierno Nacional y la administración antioqueña sobre una eventual desfinanciación de las principales obras territoriales.
De hecho, hace unos días, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, envió una carta al Ministerio de Transporte, solicitando la cesión de tres proyectos nacionales en territorio del departamento: el túnel del Toyo, la Ruta Nacional 60 (Autopista Medellín-Bogotá) y la Ruta Nacional 25 al Bajo Cauca.
Si bien ya la cartera de Transporte respondió negativamente a la solicitud -y afirmó que en los cuatro años de la administración Petro se darían 1,1 billones de pesos en recursos- el gobierno departamental ha venido pidiendo la posibilidad de concluir estas obras de infraestructuras con recursos de origen regional.
Esta propuesta de una especie de ‘vaca’ del ex presidente Uribe llega tras reiterados e injustos comentarios de parte del propio presidente de la República, Gustavo Petro, en contra de las inversiones en infraestructura como las 4G desarrolladas en regiones como Antioquia.
A mediados de febrero, el primer mandatario criticó la distribución territorial de los recursos para los grandes proyectos 4G, y señaló que solo benefician a los más ricos. “Se hacen entre la población de El Poblado, en Medellín, y Rionegro, donde quedan sus fincas”, acusó Petro, desatando la incertidumbre sobre el futuro de alrededor de $4 billones destinados a unos 15 proyectos de infraestructura en Antioquia.
Esta inseguridad se acrecienta si se tiene en cuenta que buena parte de estas iniciativas quedaron incluidas en las partidas globales por 13 billones de pesos -18 billones de acuerdo a la Contraloría- que protagonizaron los líos del Presupuesto de 2024, revelados por este diario. Más aún, en el paquete originalmente publicado por Portafolio, Antioquia encabeza el listado regional con siete proyectos en el Invías y ocho en la Agencia Nacional de Infraestructura (Ani), que sumaban 3,7 billones de pesos. Si se le suma el metro ligero de Medellín, los recursos en vilo ascendían a 4,1 billones.
La intención del gobierno Petro de definir a dedo y desde la Casa de Nariño la financiación de obras, aún con los compromisos adquiridos, ha quedado clara en las últimas semanas con varias correcciones de los decretos de presupuesto.
Que el gobierno local, los empresarios privados, los dirigentes políticos y los ciudadanos de Antioquia empiecen a impulsar ‘colectas’ para financiar infraestructuras que sirven a todo el país es un reflejo tangible de la creciente incertidumbre que las regiones están sintiendo sobre el futuro de las obras. El mejor camino para el Gobierno Nacional es asegurar tanto a Antioquia como al resto de las regiones los dineros para el avance de estos proyectos que, en su conjunto, benefician al país entero.
FRANCISCO MIRANDA HAMBURGER
framir@portafolio.co
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