La vía les reduce a los vehículos de carga pesada unos 20 minutos entre Cartagena y Barranquilla.
El vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras, y la ministra de Transporte, Natalia Abello Vives, inauguraron 19,18 kilómetros de doble calzada entre Sabanalarga y Palmar de Varela.
Esta nueva vía reduce en 20 minutos el tiempo de recorrido y disminuye los costos de transporte entre las ciudades de Cartagena y Barranquilla para vehículos de carga pesada que van hacia los centros industriales y portuarios.
“Estos 19 kilómetros que estamos entregando son solo la cuota inicial, nosotros no nos vamos a detener, estamos trabajando para sacar adelante 140 km de doble calzada nueva para el Atlántico y mejorar así su competitividad”, expresó la Ministra de Transporte.
Además de las comunidades de Sabanalarga, Palmar de Varela, Sabanagrande y Santo Tomás, los principales beneficiados son los más de 10.000 vehículos que diariamente transitan por esta vía y que tienen como origen-destino la zona industrial de Soledad, el Aeropuerto Internacional de Barranquilla, el municipio de Malambo o la parte sur de la capital del Atlántico.
“Esta importante obra no solo dinamizará la economía de los municipios aledaños, sino que también les permitirá a los miles de usuarios reducir en un 40 por ciento sus tiempos de desplazamiento y reducir considerablemente los costos de transporte”, resaltó Menzel Amín, representante de Autopistas del Sol, concesionario del proyecto vial.
En este nuevo trayecto cada calzada consta de dos carriles, cada uno de 3,6 metros de ancho, para un total de 7,3 metros por calzada.
En el nuevo trayecto se invirtieron, en total, 105.918 millones de pesos.
Día clave en túnel de La Línea
El Instituto Nacional de Vías (Invías) hará este martes la última audiencia dentro del proceso de caducidad del contrato del túnel de La Línea, para establecer si se toma esta medida administrativa. El director jurídico de la entidad entregará el contenido de la resolución que permitirá saber cuál será el futuro del megaproyecto.
El Invías podría declarar la caducidad y la terminación del contrato celebrado en el 2008 con la Unión Temporal Segundo Centenario (UTSC) o condicionar la permanencia de los actuales contratistas a un aumento en los niveles de construcción.
Independientemente de la decisión, el Gobierno ya tiene un ‘plan de rescate’.