Según el Observatorio Fiscal, las cuentas del recorte presupuestal anunciado por el Gobierno para 2024 no cuadran.
El Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana presentó un informe en el que devela serias dudas sobre el recorte de $20 billones en el Presupuesto 2024 anunciado por el Gobierno Nacional.
Según sus hallazgos, casi la mitad del recorte ($8,2 billones) no es un recorte real del gasto, pues corresponde a recursos programados inicialmente para un pago al Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), por concepto de subsidio a los combustibles.
“Este pago ahora se hará mediante deuda pública (TES) y no en efectivo. Es decir, se pagará una deuda con otra deuda, lo cual no es equivalente a gastar menos”, dice.
La situación se agrava si se tiene en cuenta que en el Marco Fiscal 2024 se admitió que el recorte necesario del gasto este año está en el orden de los $43 billones. Con lo analizado por el Observatorio, entonces, apenas se han “peluqueado” $11,8 billones, y en lo que queda del año el esfuerzo adicional deberá ser de $31,2 billones.
“El cumplimiento de la regla fiscal de este año depende de que se sigan ajustando las cuentas en todas las carteras para alcanzar el recorte que realmente se debe hacer”, apunta el centro especializado.
Un hecho a tener en cuenta tiene que ver con los efectos que habría sobre la inversión. “Esto porque los recortes en el rubro de funcionamiento son extremadamente difíciles de materializar debido a que casi el 20% corresponde a gastos de personal y más del 75% son transferencias corrientes a los gobiernos subnacionales con origen legal o constitucional lo que las hace inflexibles”.
Su llamado es a que Hacienda analice a profundidad el Presupuesto en lo que queda del 2024, programe nuevos recortes y se anticipe a que las entidades nacionales comprometan estos recursos.
Todo esto se da a la expectativa de que el Gobierno Nacional radique el Presupuesto General de la Nación 2025, que también genera alta expectativa porque habría un fuerte tijeretazo en los recursos para inversión y se metería más plata para deuda.