Bogotá_
La efectividad del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) en la generación de oportunidades para los estudiantes estaría en vilo por el aumento en los gastos que las empresas asumen al contratar practicantes, el cual pasó de 75% a 100% del salario mínimo legal vigente ($616.000).
Según el último informe de Mercado Laboral realizado por el Centro de Investigación Económica y Social (Fedesarrollo), ‘La Formación para el Trabajo en Colombia: Avances en un Largo Camino por Recorrer’, “el Sena tiene la tarea titánica de generar un aumento rápido en la productividad de los aprendices que al menos compense a los sectores productivos el incremento de los costos de vincularlos”.
El porcentaje de regulación mínima para los aprendices se adaptó este año, tal como lo especificaba la Ley 789 de 2002. La norma detallaba que cuando la tasa de desempleo anual fuera menor a un dígito, como sucedió en 2013, habría que ajustar los estándares de contratación.
El Sena anualmente forma 600.000 estudiantes con certificación, los cuales deben pasar por un contrato de aprendizaje. Para 2013, la institución educativa ejecutó 227.801 contratos y reguló 23.540 empresas.
Fernando Rojas, director general del Sena, asegura que “esto no afectaría significativamente la vinculación de los aprendices en etapa práctica”. Y agrega “en este momento, lo más importante para el Sena es formar trabajadores más productivos en las competencias y habilidades que las empresas del país requieren”.
Rosario Córdoba, presidenta del Consejo Privado de Competitividad, piensa que los resultados del estudio de Fedesarrollo son válidos y que en las empresas “no sólo se fijan en esa diferencia de 25% del aumento del suelo, también revisan la calidad y el aporte del aprendiz”. Agrega que si el aprendiz es bueno y coincide su perfil con los requisitos de la compañía, esta no va a dejar de contratarlo por la diferencia en el costo.
El reto entonces para el Sena y el Gobierno es incentivar el currículum de los aprendices. Julieta Mora, profesora de negocios del Politécnico Grancolombiano, cree que lo primero a trabajar es ampliar la cobertura de los estudios, para que técnicos y tecnólogos “salgan con más capacidades que aporten más a las empresas, y generar espacios con el Gobierno para que se contrate no como aprendiz sino como un empleado más de la empresa que ayudará a fomentar el empleo formal, pero para ello, hay establecer unas reglas y unas normas sobre las ofertas laborales con incentivos a las empresas para contratar más aprendices y estimular la generación de empleo de las pyme.