La inflación, entendida como el crecimiento en los precios de los productos, bienes y servicios en una economía, tiene repercusiones no solo en lo que cada uno de nosotros paga en el supermercado, si no en el futuro de nuestras inversiones.
Al cierre de 2013 la inflación, que se mide a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC), se ubicó en 1,94%, siendo el nivel más bajo en los últimos años. Pero a lo largo de 2014 se ha venido incrementando para acercarse al 3%, que es el punto medio del rango meta definido por el Banco de la República entre 2% y 4%.
De acuerdo con el Dane, la inflación en junio de 2014 registró una variación de 0,09%, llegando en el año corrido a 2,57% y en los últimos 12 meses a 2,79%.
Algunos factores para tener en cuenta sobre la inflación en los próximos meses serán el fenómeno de El Niño, que traerá consigo sequías en el país en el último trimestre del año y posibles aumentos en las tarifas de la energía.
Además, estadísticamente hablando, la inflación de meses como octubre y noviembre de 2013 fue negativa (-0,26% y -0,22%, respectivamente), lo cual seguramente implicará alzas importantes al cierre del presente año.
Para los inversionistas en el mercado financiero y para los ciudadanos del común el incremento en la inflación tiene repercusiones favorables en cuanto a que sus recursos pueden tener mejores retornos.
Esto se debe a que, por ejemplo, para controlar la inflación y evitar el recalentamiento de la economía, el Banco de la República inició un ciclo de alzas en las tasas de interés desde 3,25% hasta 4%. Ese incremento en los tipos de interés afecta positivamente los retornos que reciben los ciudadanos del común en sus cuentas de ahorros en la banca comercial, así como sobre sus inversiones en Fondos de Inversión Colectiva (FIC) y fiducias.
En el caso particular de los FIC´s y las fiducias, los inversionistas y los demás ciudadanos deben tomar en cuenta que los recursos se destinan, en el caso de los portafolios conservadores, a títulos de deuda pública (TES), a papeles de deuda privada y a CDT´s que siguen el comportamiento de la inflación, así como el de la Unidad de Valor Real (UVR) y el del Indicador Bancario de Referencia (IBR).
De acuerdo con cifras consolidadas de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC), en lo corrido de 2014 varias empresas privadas, especialmente del sector financiero, realizaron emisiones de bonos que están atados al IPC, a la UVR y al IBR. Esas colocaciones ascendieron a $4,06 billones, con una demanda que llegó a $8,88 billones.
Los inversionistas que participaron en esas emisiones recibirán mejores retornos con el incremento reciente en la inflación, mientras que para los demás existe un mercado de renta fija en la BVC que posibilita la compra y venta de CDT´s con las consiguientes ganancias por el alza en las tasas de interés del Banco Emisor.
En resumen, esto equivale a que la reciente subida de la inflación y las expectativas de que siga por ese camino, junto con alzas en las tasas del Banco Central, serán referente para quienes no quieren poner “todos los huevos en una sola canasta”, si no que destinan parte de sus ahorros o inversiones a fondos o fiducias más conservadoras y que a partir de ahora se convierten en buena opción para recibir buenos intereses, aunque posiblemente son inferiores a los que ofrecen otras alternativas como las acciones las cuales conllevan un riesgo mayor por lo que se recomienda desde Valora Inversiones que evalúe su perfil como inversionista.